La espectacularidad del Amazonas no se compara con ningún otro escenario en el mundo. Su selva, ríos y animales, lo ubican en lo alto de la flora y fauna mundial. En esta ocasión, redBus te presenta un lugar escondido que guarda uno de los mitos más populares de la Amazonía: el Lago de Tarapoto. ¡Descubre los delfines rosados que habitan en este destino!
¿Cómo llegar?
El Lago de Tarapoto se ubica a 80 kilómetros de Leticia, capital del departamento del Amazonas. No es fácil llegar hasta este lugar dada la complejidad de la zona. Es más sencillo llegar desde Puerto Nariño, un lugar reconocido y estratégico en medio de esta jungla. Las vías de acceso terrestre son nulas, siendo el transporte fluvial el predilecto, ya sea en lancha o en canoa.
Lago de Tarapoto, declarado sitio Ramsar
Un sitio Ramsar es un reconocimiento internacional que ratifica la importancia de los humedales, generando mayor atención del gobierno. Este galardón motiva a que se busque explotar el atractivo del lugar con el fin de generar recursos de inversión en la zona. Esto se logró con el consentimiento de las comunidades indígenas, antes de aprobar esta medida internacional de protección. El Lago de Tarapoto es el primer complejo humedal de la Amazonía que recibe la máxima medida internacional para la protección de estos ecosistemas.
Esta distinción permite que se protejan 45,463 hectáreas que incluyen 45 humedales y 22 lagos pertenecientes a la cuenca del Río Loretoyacu, hábitat de 76 especies de aves migratorias. Adicionalmente, se tendrá una atención especial con 22 comunidades indígenas de las etnias tikuna, cocama y yagua.
Colombia cuenta con siete sitios Ramsar que ocupan 750,000 hectáreas del territorio nacional. Además del Lago de Tarapoto, se encuentran la laguna de la Cocha, la estrella fluvial del Inírida, el delta del río Baudó, la Ciénaga Grande de Santa Marta, el sistema de Chingaza y el complejo de la laguna de Otún.
Hábitat del delfín rosado
Sin duda, el delfín despierta asombro en cada lugar donde aparece. Pero si hay una especie que se roba todas las miradas y suspiros, ese es el delfín rosado. Esta curiosa raza se presenta en agua dulce, especialmente en el Río Amazonas y afluentes cercanos como el Lago de Tarapoto. Este mamífero es uno de los atractivos más llamativos y mejor cuidados de la región. Esta colorida especie, llama la atención de los visitantes que acuden para lograr fotografiar este majestuoso ejemplar.
El Lago de Tarapoto está plagado de estas criaturas que, si bien no son tan juguetonas como las especies grises, resultan unos animales curiosos y amistosos. Lógicamente, es mejor esperar que sean ellos los que se acerquen a interactuar con los turistas y no al contrario, para que no se sientan intimidados en ningún momento. A diferencia de los delfines grises, la raza rosada no salta con tanta frecuencia, pasando la mayor parte del tiempo en las profundidades cazando tortugas, peces pequeños y crustáceos.
Estos animales son muy sensibles al ruido, así que lo más prudente será no prender el motor de las lanchas, ya que esto podría ahuyentarlos. Es importante recordar que son mamíferos, lo que indica que saldrán a respirar a la superficie. Quienes deseen toparse con ellos, deben estar pendientes a cualquier resoplo que indique que están cerca. Ahora, los que acuden al Lago de Tarapoto para fotografiar al delfín rosado deben ser muy pacientes. Si corren con suerte, será la misma naturaleza la que permitirá que se logre la fotografía perfecta.
La leyenda del delfín rosado
En la mitología amazónica, al delfín rosado se le conoce como “El Galán”. No es un animal que se observe con frecuencia, aunque en el Lago de Tarapoto pueden verse con cierta frecuencia. La leyenda ubica al delfín rosado como un apuesto guerrero que fue condenado a vivir en el río Amazonas. También dice que en las noches de luna llena, este galante hombre sale del agua vestido con traje blanco y sombrero de paja para visitar los pueblos de las orillas. En estos lugares suele bailar, beber y conquistar mujeres hermosas, que posteriormente lleva consigo al agua. Esta figura humana desaparece volviendo a su forma animal y dejando embarazadas a sus amantes.
Es tal el mito, que todos los hijos de padres desconocidos son asociados directamente con una aventura del delfín rosado. Quienes afirman haber descubierto a este impostor, dicen que basta con quitarle el sombrero para ver el orificio por donde respira. Por obvias razones, el delfín rosado no es un invitado grato en los pueblos de las orillas. Muchos han querido cobrar venganza atacándolo hasta quitarle la vida. Esto ha llevado a que sea una especie en vía de extinción. Por esta razón su cuidado debe ser especial respecto a otras criaturas dentro del Lago de Tarapoto.
Una curiosa variedad de especies
Está claro que son los delfines rosados los que roban más miradas en el Lago de Tarapoto. Sin embargo, un número importante de especies poco conocidas también habitan en este lugar. Gracias a las fuertes precipitaciones, se crean altas aguas que permiten albergar varias criaturas. Llaman la atención la diversidad de manatíes que abundan en las orillas. Los visitantes también quedan impactados con el caimán negro, un interesante reptil propio del Amazonas.
La pesca también tiene su lugar en el Lago de Tarapoto. Es importante resaltar que se trata de no interferir con animales diferentes a los que se planean pescar. La principal raza es el Pirarucús, un gigantesco ejemplar que abunda en esta zona. Adicionalmente, se suelen pescar diferentes alevines de peces que resultan muy apetecidos, tanto por los habitantes como por los visitantes.
El Amazonas siempre tendrá lugares y culturas encantadoras. Sigue consultando nuestro blog de viajes para conocer más destinos como este que te harán enamorarte más de Colombia.
Créditos de portada: ttnotes.com