En Villa de Leyva existe una construcción salida de un cuento de los hermanos Grimm, se trata de una gigantesca casa de barro, conocida como Casa Terracota. Hoy, redBus te cuenta todo sobre esta impresionante obra de artesanía, en el departamento de Boyacá.
Siempre será reconfortante encontrar elementos mágicos en el mundo y tener una concepción fantástica de la vida. Un claro ejemplo de esto, es la impresionante Casa Terracota, ubicada a las afueras de Villa de Leyva. A simple vista parece un set de alguna película infantil pero en realidad es una gigantesca porcelana.
Para su construcción, se utilizaron más de 1000 toneladas de tierra y el proceso duró alrededor de 20 años. El hombre detrás de este inmenso proyecto, es el arquitecto Octavio Mendoza Morales. Según él, esta casa “convierte la tierra en arquitectura habitable”. Por eso fue moldeada a mano, como si se tratara de una delicada porcelana.
Para la construcción de la Casa Terracota, Octavio tuvo que inventarse un horno especial para cocinar cada pieza. Este proceso tomó alrededor de una semana por pieza. Dichas medidas muestran el trabajo y la tenacidad de su creador.
Una de las particularidades de la casa es que los planos se dejaron de lado y la construcción fue dándose de forma natural, como una obra de arte. La casa tiene una extensión de 500 metros cuadrados y una altura aproximada de 5 pisos. Además de esto, las camas, los muebles, los baños, la cocina y todas las demás áreas comunes, fueron elaboradas en arcilla.
En Casa Terracota nada está dispuesto al azar. Desde sus jardines hasta el más mínimo detalle está debidamente pensando y cuidado. Es por eso que personas de diferentes lugares del mundo, vienen exclusivamente a conocerla.
Todo empezó en 1999, cuando Octavio, un orgulloso arquitecto boyacense, estaba amasando un poco de arcilla y una niña le preguntó si era capaz de hacer una casa de esa misma manera.
Octavio creció en Villa de Leyva, en la casa de su abuela, luego allí pasaba sus vacaciones. Desde pequeño se percató que con la llegada de los nuevos propietarios, se tumbaban las casas antiguas. Estas eran hechas bajo el sistema de tapia pisada en adobe, una técnica milenaria que aprovechaba las cualidades del suelo.
Su idea fue entonces, promover un estilo de vida novedoso y sostenible con la comunidad y el medio ambiente. Ante todo, la idea es preservar la belleza de las casas campesinas boyacenses que adornan las verdes montañas de este departamento.
Todo el trabajo se realizó con herramientas manuales como picas y palas. Además de esto, Octavio tuvo la suerte de conocer a una familia que trabajaba en Chircales, en la fabricación de ladrillos, quienes lo ayudaron en su labor. Uno de los puntos claves que reúne esta casa, es que en su ADN, están los cuatro elementos: tierra, agua, aire y fuego.
Además, la casa aprovecha la energía solar para calentar el agua y hasta para preparar el café. Ya que la casa busca ser un espacio de formación y conocimiento, en ella se reciclan todo tipo de materiales para ser aprovechados de nuevo.
La casa no tiene fines turísticos. Fue creada para ser un centro de intercambio cultural y un ejemplo de arquitectura sostenible. Octavio vive aquí, en uno de sus cuartos, algunos de estos tienen ventanales en el techo por donde se divisa el cielo.
Los interesados pueden acudir a la casa a leer, pintar, dibujar y disfrutar del espacio. La sensación de libertad es completa en este lugar. Por un lado, está el paisaje amplio alrededor de la casa y, por otro, no existen rejas. En vez de esto, Octavio diseñó gatos, pájaros y plantas de hierro forjado que cubren los ventanales.
Como parte de este proceso, Octavio construyó una casa aparte, con el fin de realizar una residencia artística. Esta se llama La casa del artista. El objetivo es realizar cursos y talleres con las personas de la región. La idea es recibir a personajes influyentes y de gran trayectoria en sus respectivos campos.
Cerca de Casa Terracota hay cientos de cosas por ver y visitar. Villa de Leyva es uno de los destinos más visitados en Colombia. En este lugar se pueden realizar actividades al aire libre así como ir a relajantes spas. Acá se encuentra de todo y para todos.
Uno de los principales atractivos de Villa de Leyva es su arquitectura colonial. Este es un plan ideal para finalizar el día. Además, muy cerca se encuentra el Santuario de Fauna y Flora de Iguaque. Otros lugares de interés son: Museo El Fósil, el Parque Arqueológico de Monquirá, el Parque Gondava, el Parque ecológico la Periquera y Los pozos azules.
Villa de Leyva, además de ser Patrimonio Histórico y Cultural, es un punto de encuentro de culturas. Unos de los eventos más representativos que se llevan a cabo en este municipio son: El Festival de Astronomía, el Festival de Luces, el Festival Internacional de Cine Independiente y el Festival del Viento y las Cometas.
Llegar a Casa Terracota es muy sencillo. Primero hay que llegar a Villa de Leyva, desde Bogotá se puede tomar un bus directo. El recorrido es muy agradable ya que se puede disfrutar del paisaje cundiboyacense. El recorrido es de aproximadamente 3 horas y media. Algunas de las empresas que cubren esta ruta son: Omega y Flota Valle del Tenza.
Ya en Villa de Leyva, hay que tomar la vía a Santa Sofía desde la plaza central. El trayecto toma aproximadamente 10 minutos. Una vez allí, hay que pagar el valor de ingreso que es de $3.000 COP (1 USD) para niños menores de 12 años y $10.000 COP para adultos (3.25 USD).
Villa de Leyva cuenta con gran capacidad para albergar visitantes todo el año. No obstante, lo mejor es reservar con antelación para evitar contratiempos. Hay muchas opciones de alojamiento, incluyendo hoteles, hostales y casas de familia.
Además, la oferta gastronómica es de lo mejor de la región. Aquí existen desde expresiones culinarias populares hasta sofisticadas propuestas de reinterpretación de comida típica. Algunos de estos restaurantes recomendados son: Mercado Central, La Feria y Tierra Buena.
Casa Terracota es tan solo uno de los sitios por visitar en Villa de Leyva. Para conocer más lugares mágicos en Boyacá y Colombia, no olviden visitar nuestro blog de viajes.
Créditos de portada: www.msn.com
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