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En esta ocasión, en redBus queremos contarte sobre la historia y los atractivos de la plaza más famosa de Colombia, La Plaza de Bolívar. Así que alista tus cosas, prepara tu silla de montar, que Bolívar nos necesita para su proclamación de Libertad.
La Plaza de Bolívar es la plaza principal de la ciudad de Bogotá y, por lo tanto, de Colombia. Se ubica en el centro de la ciudad, y a su alrededor se construyeron varios de los edificios más importantes de la ciudad, como el Palacio de Justicia, el Capitolio Nacional, la Catedral Basílica Metropolitana de Bogotá y Primada de Colombia, entre otros.
Se la consideró como Monumento Nacional Colombiano el 26 de octubre de 1994 y fue declarada como tal el 19 de octubre de 1995. Se estima que puede albergar a más de 55 mil personas, transformándose así en el epicentro para reuniones políticas, culturales, religiosas y otras manifestaciones.
Los españoles iniciaron la construcción de la Plaza de Bolívar, el 27 de abril de 1539. En ese entonces era conocida como Plaza Mayor. Fue el sitio especial para realizar fiestas relacionadas a monarcas españoles y fue también centro del mercado, donde los ciudadanos podían ir y abastecerse.
La Plaza de Bolívar no siempre fue igual. A lo largo de su historia tuvo una innumerable cantidad de modificaciones que cambiaban, no solo su aspecto arquitectónico y de diseño, sino también, el concepto de su uso. En 1538 la plaza contaba con una picota, y servía de vidriera para observar castigos y escarmientos.
Alrededor del año 1600 se habilitó, también, para realizar corridas de toros y varios eventos sociales y culturales de la época. Casi 80 años después, precisamente en 1681, se retiró la picota y se cancelaron las corridas, colocando en su reemplazo una fuente de agua que abastecía a la población.
En el año 1776, el Edificio del Virreinato, uno de los principales edificios que bordeaba la plaza, fue quemado, aparentemente como acción de insurrección por parte de la Rebelión de los Comuneros, movimiento armado que se alzó en contra de la figura del Visitador Regente, un jefe administrativo leal, encargado de recaudar impuestos para la corona.
Luego de la Independencia, en el año 1821, la plaza fue oficialmente llamada como la Plaza de la Constitución. Más tarde, en los años 1842 a 1845, aproximadamente, se construyó el edificio del Congreso de la República, justo en el mismo sitio donde fue quemado el Edificio del Virreinato.
El 20 de julio de ese mismo año, el Congreso de la República inauguró la primera estatua del Libertador Bolívar en el país. Hecha en bronce, por el escultor italiano Pietro Tenerani, se situó justo en el centro de la plaza. La escultura miraba en dirección a la Catedral. Fue por tal acto que se le cambió el nombre a Plaza de Bolívar.
En 1880, se realizó una remodelación en el pedestal de la estatua, y se aprovechó para girarla, mirando hacia el Palacio de Justicia. Un año más tarde se mandó a construir un jardín de estilo Inglés, rodeando con cercas de hierro la estatua y, luego, colocaron 4 fuentes de agua a sus costados.
Ya para finales del Siglo 19, algunas cuadras de Bogotá contaban con iluminación a gas, incluida la Plaza de Bolívar, consiguiendo ser entonces el sitio ideal donde los ciudadanos podían disfrutar de proyecciones de cine y reunirse para socializar, convirtiéndose así en el punto de encuentro favorito de los bogotanos.
Las últimas remodelaciones que recibió la plaza fueron a partir de 1919, cuando se decidió retirar el jardín Inglés de rejas de hierro que bordeaba la escultura. En 1927, se instalaron cuatro pilas con fuentes de agua y se modificó, nuevamente, el pedestal de la estatua. Ya para 1960, la plaza quedó enteramente para uso peatonal, eliminando espacios de parqueaderos y modificando las líneas horizontales de las escaleras del Capitolio.
La Plaza fue, también, un símbolo de ostentosidad. Aquellos habitantes que vivían cerca de ella, eran personas consideradas como “La crema y nata de la sociedad”, mientras que los que vivían más alejados eran las personas humildes, como campesinos, indígenas o mestizos. En la actualidad, la Plaza de Bolívar es una de las plazas más queridas y visitadas por los turistas en todo el país.
Entonces ya sabes, si planeas ir a Bogotá, te recomendamos que des un paseo por la Plaza de Bolívar y los edificios que la rodean. Si logras recordar este artículo, sentirás cómo sus más de 350 años de historia, fluyen en cada rincón del lugar. ¡Ah!… Y no olvides comprar maíz para darle de comer a las palomas mientras tomas bellas fotografías.
Si deseas conocer más sobre los atractivos que te ofrece Bogotá, continúa leyendo nuestro blog de viajes y déjate sorprender.
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