La gastronomía colombiana llama mucho la atención por su fusión de sabores. Algunos de los platos más famosos que ofrecen los colombianos son la bandeja paisa, el ajiaco y el sancocho. Sin embargo, hay otras recetas muy apetecibles que no logran ser tan representativas como lo son en su regiones. Conoce con redBus cuatro de estos platos para que los pruebes en tu próxima visita.
Este producto autóctono del Valle del Cauca, si bien es conocido en algunas partes del país, no logra un impacto como el que tiene en el corazón de los vallunos. La chuleta valluna es un corte fino de centro de pierna de cerdo apanado con harina de trigo y huevo batido. Obtiene el color dorado y la textura crocante luego ser freído en aceite. Esta preparación puede servirse como almuerzo o como una comida rápida. Además, se puede acompañar con papas a la francesa.
Como es uno de los platos menos populares de Colombia, su sabor se mantiene auténtico y no tiene muchas alteraciones. Solo varía su sabor final porque se le agregan diferentes condimentos como comino, orégano, pimienta y demás especias.
Este pasabocas se encuentra con frecuencia en la costa atlántica, donde se consume regularmente. Su interior suele ser de carne, aunque en muchas ocasiones suelen servirse rellenas de queso. Este plato consta de yucas frescas, hervidas y luego amasadas a mano. Cuando se tiene una masa blanda se le agrega el relleno, ya sea de carne o de queso. Con el relleno cubierto totalmente por la masa, evitando cualquier entrada de aire, se sumergen en aceite para que se frían y obtengan una textura crocante.
Las carimañolas suelen confundirse con los pasteles de yuca, pero es importante aclarar que estos últimos tienen una textura más suave y no tan crocante como la de las carimañolas.
Esta exquisita preparación proviene de la selva amazónica del país. Se elabora con un pescado de cuero cortado en postas o un pescado de escamas, sazonado con cebolla, pimentón y sal al gusto. Luego se envuelve en una hoja de bijao y se coloca entre 20 y 30 minutos sobre la brasa, para que la cocción dentro de la hoja permita que los jugos del pescado se concentren.
Esta comida es uno de los platos menos populares de Colombia, pues es típica de los pueblos nativos del Amazonas, que además de usar esta preparación con pescado, también acostumbran envolver en estas hojas hualo, muspachos y yucras.
Para sus consumidores frecuentes es un manjar, mientras que para otros puede ser un plato extraño. Se trata de una mezcla de riñones, hígado, tripas y corazón de cabro, bañados en su sangre. Toda esta combinación se sazona con limón, pimentón, cebolla y tomate, y se suele servir acompañada de yucas y arroz.
Son bastantes los comensales de la Pepitoria, principalmente en Santander.
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Créditos de portada: apolorestaurantes.com
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