Colombia es un país que deja muy gratamente sorprendidos a todos sus visitantes. Si pasas por este hermoso país, no puedes dejar de llevarte un lindo regalo para tu familia y amistades. En redBus te damos varias ideas para que lleves los mejores souvenirs de Colombia.
Tarde o temprano todo viaje llega a su fin y siempre hay que comprar regalos y souvenirs. Ya sea que los vayas comprando o que dejes todo para último momento, en Colombia hay una gran diversidad de cosas para llevar a casa. Todo depende de tus gustos y el de las personas a quien quieras sorprender.
Entre los souvenirs más comunes para obsequiar están las artesanías y los dulces. Pero depende de la parte de Colombia a la que hayas visitado para encontrar el detalle perfecto. Hoy te dejamos con algunos de los más lindos recuerdos típicos de Colombia.
Sí, estás leyendo muy bien, ¡esmeraldas! Y es que Colombia es el mayor productor de esta joya en todo el mundo, razón por la cual se pueden comprar a precios muy accesibles. El país tiene una participación del 55% del mercado mundial, así que no debes dejar pasar la oportunidad.
Entre los departamentos de Cundinamarca y Boyacá se encuentra el hogar de las esmeraldas colombianas. La zona conformada por los municipios de Muzo, Gachetá y Gachalá, y las minas de Borbur, Coscuez, Chivor, Peñas Blancas y Otanche, concentran los principales yacimientos.
Además de ser uno de los productos insignia de la minería en Colombia, las esmeraldas hacen también parte de la mitología propia del país.
Dice la leyenda que estas piedras preciosas son las lágrimas de Fura, una indígena muisca. De sus ojos cayeron estas lagrimas por la pérdida de su amado, Tena. El llanto de Fura regó los bosques y penetró la tierra hasta convertirse en estas hermosas piedras verdes.
Con las esmeraldas se pueden hacer muchas joyas, entre estas anillos, cadenas, pulseras, collares y elementos decorativos.
Para continuar con nuestras recomendaciones, pasamos a un producto que no necesita presentación, el café. Las principales características del café colombiano es que es suave y de taza limpia. Tiene acidez, cuerpo medio/alto, y aroma pronunciado y completo.
Gran parte de su sabor se debe al origen volcánico de los suelos de Colombia, sumado a esto está la cercanía con la línea ecuatorial y la altura en la que se encuentran los cultivos. Más allá de esto, la tradición cafetera de Colombia, le ha servido para desarrollar un grano único y perfeccionar sus procesos.
Cabe resaltar que Colombia es el tercer país productor de café en el mundo. Además es el mayor productor de café suave en el mundo. Los principales países importadores de esta delicia son: Estados Unidos, Alemania, Japón, Países Bajos y Suecia.
Una de las zonas más reconocidas en este aspecto es el Paisaje Cultural Cafetero, formado por los departamentos de Quindío, Armenia, Caldas, y el norte del Valle del Cauca. No obstante, también hay cultivos en la Sierra Nevada de Santa Marta, Santander, Nariño, Huila, Cauca, Tolima, Boyacá, Casanare, Cesar y Caquetá. Todos estos lugares cuentan con pisos térmicos diferentes que le aportan un toque especial al sabor del grano que se produce en sus tierras.
La marca más famosa de café colombiano es Juan Valdez. No solo se trata de un café sino de un personaje creado por la agencia DDB en 1959, por encargo de la Federación Nacional de Cafeteros. El personaje es una de las marcas más reconocibles del mundo y garantiza al café 100% colombiano.
En la actualidad, Juan Valdez tiene tiendas en más de una docena de países entre los que se encuentran: España, EEUU, México, Alemania, Kwait, Reino Unido, entre otros.
Finalmente, tenemos el sombrero vueltiao. Este es típico de las sabanas de Córdoba, Sucre y Bolívar. El sombrero fue declarado símbolo cultural de la nación, mantiene vivo el legado de la cultura precolombina Zenú.
Esta pieza tan particular y tan usada por los colombianos es tejido con las fibras de la caña flecha. Para lograr sus colores, algunas de las fibras se blanquean con caña agría y otras se tiñen de negro con jagua, dividivi y cáscara de plátano.
Anteriormente, los sombreros se cosían a mano, con aguja e hilo de maguey. Esta era una labor exclusiva de los hombres, actualmente lo hacen ambos sexos. Más tarde se empleó el hilo de bola. Hoy se cosen en máquinas de coser sencillas, con hilo de cartucho y de nailon.
La calidad del sombrero depende del tipo de fibra que se utilice y de la cantidad de tiras de fibra trenzadas. Un sombrero de calidad será flexible y liviano. Algunos clientes piden marcar los sombreros con sus nombres. Anteriormente, las letras se elaboraban directamente en la trenza a manera de pintas en la parte frontal de la última vuelta o “vueltaúltima”. Hoy en día, el marcado del sombrero se hace después de su confección.
Cuando pases por Colombia no olvides adquirir estos souvenirs y muchos otros productos locales. Si deseas información sobre interesantes destinos en el país, visita nuestro blog de viajes.
Crédito de portada: atrapalo.com.co
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